Este insecto de ciclo larvario es de aspecto muy similar a un escarabajo y son sus larvas las responsables de los daños a la madera.
La Carcoma tiene la capacidad de realizar vuelos y depositar los huevos en las diferentes rugosidades que presenta la madera. Una vez eclosionan estos huevos aparecen las larvas, que, con su potente mandíbula realizan agujeros en la madera para instalarse en su interior y seguir alimentándose.
Cualquier persona no especializada en los insectos que atacan a la madera puede identificar mediante la observación de diferentes indicios una presencia de Carcoma en la madera. Algunos de estos indicios pueden ser:
• Presencia de agujeros en la madera
• Serrín
• Ruidos que provocan al devorar la madera